Add parallel Print Page Options

Dirás: ‘Oigan la palabra del SEÑOR, oh reyes de Judá y habitantes de Jerusalén. Así ha dicho el SEÑOR de los Ejércitos, Dios de Israel: He aquí que yo traigo un mal tan grande sobre este lugar, que a quien lo oiga le retiñirán los oídos. Porque me han abandonado, han hecho de este lugar algo extraño, y en él han quemado incienso a otros dioses que no conocieron ellos ni sus padres ni los reyes de Judá. Han llenado este lugar con sangre de inocentes. Han edificado lugares altos a Baal para quemar en el fuego a sus hijos en holocausto a Baal; cosa que no les mandé ni hablé ni me vino a la mente.

Read full chapter